Sencillez y humildad hasta el fin

Jorge Bergoglio pasó a la historia como el más relevante de nuestros compatriotas en la geopolítica mundial. Como un ingeniero espiritual, político y cultural del siglo XXI.

Fue un papa que el mundo no esperaba, nació en Buenos Aires, el 17 de diciembre de 1936, en el seno de una familia de inmigrantes piamonteses. Mayor de cinco hermanos, su padre era ferroviario, su madre, ama de casa.

Rosa, la abuela del futuro Papa, fue clave en su vocación. Por eso Bergoglio siempre subrayó el rol fundamental de los abuelos en la transmisión de la fe.

Ingresó al seminario de la Compañía de Jesús a los 21 años y fue ordenado sacerdote el 13 de diciembre de 1969, doce años después. En junio de 1973, fue nombrado provincial de la Compañía de Jesús en la Argentina, cargo que ejerció durante seis años. De 1980 a 1986, presidió el Colegio Máximo de San Miguel, un centro universitario jesuita.

Bergoglio se hizo notar por sus colegas del mundo entero en dos ocasiones gracias a su capacidad de trabajo, su aptitud para el diálogo, su poder de síntesis, su buena pluma y sus ideas sobre lo que debía ser la renovación de la Iglesia.

La primera vez fue cuando, unos meses después de haber sido creado cardenal por Juan Pablo II en febrero de 2001, es designado expositor del sínodo de los obispos, en reemplazo del arzobispo de Nueva York, cardenal Edward Egan, cuando éste tuvo que regresar de urgencia a su país por los atentados del 11/9.

La segunda vez fue en 2007, en Aparecida, Brasil, donde fue encargado de la redacción del documento final -lo que luego llamaría el programa o mandato de su pontificado- en la Va Conferencia de Obispos Latinoamericanos, a la que asistió el papa Benedicto XVI.

Años despues de todo su trabajo y trayecoria su elección fue una sorpresa universal. Para la elite argentina, que le había dado la espalda. Pero también para el resto del mundo. Por primera vez un Papa venía de las periferias. Con Juan Pablo II se había quebrado la norma de los pontífices italianos. Pero el Cardenal argentino fue el primer Papa no europeo y el primer jesuita.

Transmisión en vivo del ultimo adios al Papa Francisco

La tumba que eligió el Papa para su descanso eterno

El Papa Francisco, fallecido el pasado lunes a los 88 años, descansará en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma, como reflejo de su compromiso con la austeridad y su profunda devoción mariana. De acuerdo con la imagen revelada por la Santa Sede, el pontífice será enterrado en una tumba sencilla, fiel a las instrucciones que dejó en su testamento.

La sepultura esta ubicada entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, estará marcada por una losa de mármol con la inscripción “FRANCISCUS” y una reproducción en plata de su cruz pectoral.

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